Trucos para blanquear los dientes en casa

¡ Hola guap@s !

Hoy quiero hablaros de varias formas de blanquearnos los dientes en casa y con productos que son fáciles de conseguir y además muy económicos.

Está de moda lucir una sonrisa radiante, luminosa, con un blanco casi nuclear ¿ estáis de acuerdo ? No sé si a vosotros os ha pasado, pero a mí cuando veo esos dientes tan relucientes me da por coger un espejo y mirar el tono de los míos, y es entonces cuando me digo que tengo que hacerme algo para blanquear. Bueno, pues después de documentarme, pedir consejo a varias amigas expertas y comentárselo a mi propio dentista ya tengo las soluciones más naturales, efectivas y baratitas.

1- MEZCLAR LA PULPA DE UNA FRESA CON BICARBONATO

Es tan sencillo como lo veis, no tiene misterios. Tenéis que aplastar con un tenedor una fresa y agregarle una cucharadita de bicarbonato sódico común, lo emulsionáis y obtendréis una pasta con la que os cepillaréis los dientes. Esto lo podéis hacer un par o tres de veces a la semana y el resultado es muy bueno. Notaréis los efectos desde la primera aplicación.

2- MEZCLAR ZUMO DE LIMÓN Y BICARBONATO

Esta segunda opción es también muy efectiva, pero según mi odontólogo es un poco más abrasiva para nuestro esmalte protector ya que los ácidos que contiene el limón tienen muchas propiedades desincrustantes y si lo usamos con más frecuencia de la debida podríamos estar dando un paso para atrás. De manera que si optáis por el limón no lo hagáis más de una vez por semana.

Se trataría de mezclar estos dos productos y cepillarnos de la forma habitual.

3- CANELA Y BICARBONATO

La canela tiene propiedades emolientes y parece ser que no es tan abrasiva con nuestro esmalte dental, o sea que si queréis probar con la opción tercera también podéis hacerlo. Así como las fresas no son tan fáciles de conseguir durante todo el año porque su época es entre abril y junio ( en España ), la canela en polvo es intemporal y todos la tenemos en casa o la podemos encontrar en cualquier supermercado cercano.

4- ENJUAGUE CON AGUA OXIGENADA

¡Tal y como lo leéis ! Cuando hayáis cepillado vuestros dientes de la forma que elijáis, sólo debéis cambiar por un día a la semana vuestro elixir habitual por agua oxigenada normal, veréis que sale como una espuma cuando estéis enjuagando vuestros dientes con ella. La mantenéis aproximadamente un minuto dentro de la boca y luego repetís la operación con agua normal para quitaros el mal sabor que queda. Pero doy fe que quedan unos dientes lustrosos y por supuesto desinfectadísimos 🙂

 

¡Ya me contaréis si os ha funcionado!