Este tema da para hablar largo y tendido, ¿verdad? La decisión es libre, evidentemente.
Porque cuando se trata de decidir entre tener sexo con amor o sin él, todo se basa en los gustos personales. Hay personas que viven el momento, que practican el Carpe Diem, mientras que otras mujeres sueñan con la posibilidad de que haya un futuro en común con su pareja. Hay parejas que durante la relación sexual se miran fijamente a los ojos y se dan besos o susurran al oído cuánto se aman, y se quedan a dormir juntos y abrazados después. Hay otras personas que, después del sexo, vuelven cada cual a su casa.
Todo se basa en la personalidad de cada cual, ya que hay mujeres más románticas y tal vez influidas por las películas y los cuentos felices, mientras que otras se dejan guiar más por la parte lúdica del sexo y por sus instintos.
¿Cuál es peor o mejor? Todo depende de quiénes somos y de qué buscamos para nuestra vida. El sentimiento de soledad o de vacío que se experimenta tras un acto sexual puede indicar perfectamente que nuestra configuración base no está preparada para tener relaciones de sexo sin amor.
Sexo sin compromiso
El sexo sin compromiso resultaría una opción idónea en el caso de que no estemos preparados todavía para una relación seria basada en la fidelidad y el compromiso. El placer no faltará. Pero, si el hombre en cuestión está contigo sólo por sexo y no por otras razones, ¿de verdad consideras que hará todo lo que pueda por complacerte y por descubrir qué te enloquece en la cama, o se limitará a su propio disfrute? Carmen López Sosa, catedrática de sexología de la Universidad de Salamanca afirma sabiamente que: “El sexo es delicioso, pero con amor se transforma en algo extraordinario. Va más allá del placer, es una compenetración”.
No se trataría de etiquetar a cada una de ellas como “buena” o “mala”, sino de averiguar cuál se ajusta más a nuestras necesidades. Si tienes claro que en ese hombre sólo buscas una relación basada en el placer, y estás segura de que ni buscas ni buscarás un cariño especial, entonces tal vez en este momento no necesites el amor en tus relaciones sexuales. El sexo sin amor puede hacerte sentir más libre y, si es la sensación que buscas en tu actualidad, bienvenida sea.
DIFERENCIAS ENTRE SEXO Y AMOR
La primera vez que estás con alguien puede ser un poco raro de identificar, ya que hace falta tiempo para que se conozcan el uno al otro. Si estamos enamorados de esa persona, buscamos sus puntos de placer, hacer que se sienta cómodo e intentar cuidar de esa persona en los momentos más íntimos.
Sin embargo, si solo tenemos sexo buscamos nuestro propio placer.
Cuando estamos en una relación de “follamigos”, la delgada línea que separa al placer del amor es realmente complicada. ¿En qué momento querer a alguien como amigo, además de atraerte físicamente y tener sexo juntos no te hace pensar que las cosas pueden ir a más?
Es muy difícil mantener una relación puramente sexual a largo plazo.
Muchas veces, el juego previo suele escasear a la hora de tener sexo. También es cierto que el juego previo no solamente es algo sexual, sino que va desde el momento en que dos personas tienen química, se enamoran, buscan tiempo para estar juntos.
Así que los juegos previos pueden ser una estupenda diferencia entre tener solo sexo o hacer el amor.
El hecho de querer alcanzar juntos el clímax también marca la línea que separa el sexo con amor del sexo sin amor, eso es obvio. Nada más gratificante que coordinarse con tu pareja para tocar juntos el cielo .
Personalmente le doy mucha importancia a la dedicación y al tiempo invertido en los encuentros. Muchas veces, cuando tenemos sexo buscamos hacerlo rápidamente y conseguir solo el desahogo sexual En cambio, cuando hacemos el amor queremos que el placer dure lo máximo posible, por lo que se convierte en un acto de sensualidad más que de sexualidad.
Por último el peldaño de la química es para mí uno de los fundamentales:
La química es algo que solo se puede crear cuando estás en el proceso de enamorarte de una persona. Puedes sentir atracción sexual por alguien, pero no esa química que implica ciertos sentimientos y que te permite diferenciar entre tener sexo y hacer el amor.
¿Vosotras con qué os quedáis?